Mucha gente me pregunta: ¿Cómo sueñan las personas ciegas?, ¿ven imágenes?, ¿escuchan voces?. En mi caso sueño mucho, por lo general recuerdo siempre mis sueños; los vivo de una manera tal que parecen reales.
Para que comprendan lo que estoy contando voy a remontarme a mi niñez. Cuando tenía tres o cuatro años me iba a dormir y al día siguiente cuando despertaba decía “Mami, ayer estuve en un lugar tomando un té, también estuve en…” a veces me despertaba preguntando “¿y el tren en donde viajaba?” o preguntaba “¿por qué a veces cuando duermo, me voy de casa? Por suerte me explicaron que esas vivencias eran llamadas sueños.
Mi madre me decía “estás en tu cama, pero estás soñando” eso logró tranquilizarme y pude dormir en paz. Cuando crecí recordé mucho este hecho y comencé a filosofar sobre el mismo (como lo han hecho muchos poetas anteriormente) y me preguntaba “¿Cómo sabemos si estamos despiertos o dormidos? ¿Cómo sabemos si realmente lo que vivimos es real o no? ¿Cómo sabemos realmente si existe el tiempo?. Con el correr de los años comencé a adentrarme en el mundo de los sueños, de una manera más profesional.
Estudié Metafísica, leí libros de parasicología y comprendí que no siempre soñamos desde el inconsciente. Muchas veces soñamos desde el YO REAL (como me enseñó Anaceli Castro) con el tiempo mis sueños fueron evolucionando, soñaba que ayudaba gente, que iba a lugares, y muchas veces soñé cosas que le ocurrían a mi amigos. Comencé a estudiar cual era la diferencia entre un sueño premonitorio o un sueño del inconsciente. En sueños podemos encontrarnos con personas y hasta podemos sentir las sensaciones que éstas tienen. No importa lo lejos que estén.
Sí, por supuesto hay que tener cuidado cuando realizamos este viaje astral, debemos protegernos mucho con la ayuda del Arcángel Miguel y la llama Violeta, pero podemos ser vehículos de energía para mucha gente, por ello para poder hacer bien este trabajo, está bueno pedirle a nuestro Ángel que nos guie en nuestros sueños y que sean ellos quienes decidan a donde podemos llegar a ir.
Por eso podemos rezar antes de dormir y pedir que se tranque nuestro inconsciente, dando el mando y el poder a lo superior antes de descansar. Cuando logramos conectarnos con una persona (como me ocurrió a mí con un ser de luz muy especial, al que sigo ayudando, mandándole energía porque es un ser que tiene sabiduría en el alma. Un ser que le canta a la vida, que bendice con el rosario invocando a la Virgen en cada cosa que va a realizar). Cuando nos pasa algo así tenemos que agradecerle al Universo por un regalo tan mágico. Sí, lo comprobé en el año 2006 y lo sigo comprobando, la magia de los sueños es poderosa, somos como dice mi profesora de metafísica (Esos Ángeles invisibles que protegemos hasta el cansancio a estos seres que nos envía el Padre, deseándoles lo mejor y luchando para que encuentren su camino y evolución. Tal vez para la otra persona, la que ustedes ayuden no es tan importante y no tiene el mismo nivel de evolución para comprender de qué se trata. Si tienen ese don no se asusten, recuerden que no solo los ojos físicos pueden mirar, nuestro tercer ojo puede ayudarnos a ver mucho más allá.
Eso sí, hay que tener mucho cuidado y trabajar siempre practicando la humildad, sin caer en el orgullo y la soberbia espiritual. Yo les recomiendo que escriban sus sueños, que pongan en manos de Dios y de los Ángeles sus problemas antes de ir a dormir y verán como a través de sus sueños podrán ver soluciones, prevenir y también estarán durmiendo tranquilos y seguros, descansando en paz, dejando que la luz del Universo sea la que los guie, confiando siempre en nuestra intuición y sin miedo, porque a través de nuestros sueños podremos intentar construir nuestra realidad.
